Crespones negros cuelgan de la bandera del flamenco, un género que está
de luto porque ha muerto Moraíto Chico, el guitarrista al que bastaba
una genialidad entre las cuerdas o una 'pataíta' por bulerías, tan
penetrante y pasmosa, para hacer llorar de gozo a los auditorios más
diversos.
Iba a cumplir sus 55 años de edad y la muerte le sobrevino sobre las 10:30 de la mañana de nuestro 2012 por un encharcamiento pulmonar en el Hospital General de Jerez de la Frontera, donde se encontraba ingresado por un cáncer de pulmón que le sobrevino hace unos cuatro años.
El mundo del flamenco está consternado por cuanto
Moraíto era, aparte de un instrumentista admirado por todos, desde Paco
de Lucía a la nueva generación, un ser humano de difícil cotejo que
recibirá el último adiós de sus incondicionales, amigos y seguidores a las 12.00 de la mañana en el Cementerio Municipal de Jerez de la Frontera.
D.E.P
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